Categoría: campañas

¡EMERGENCIA VECINAL!

Neighborhood Emergency! Donate!

Introduciendo la Campaña de Donaciones

¡EMERGENCIA VECINAL!Es la Campaña de Recolección de fondos de JHISN que invita a realizar donaciones directas a las siguientes seis organizaciones comunitarias de defensa de los derechos de los inmigrantes de Queens, los cuales proveen alimentos, ayuda mutua, servicios y solidaridad a los trabajadores inmigrantes y a sus familias durante la crisis del COVID-19

La pandemia afectó desproporcionadamente a las comunidades inmigrantes e indocumentadas. La ayuda de emergencia que proporcionó el gobierno ha excluido a los inmigrantes, especialmente a jefes de familia indocumentados y trabajadores. Las organizaciones locales que luchan por los derechos de los inmigrantes han salido al frente para proteger a las personas de esta múltiple crisis: de salud, empleo, alimentos y vivienda. ¡Necesitan tu Apoyo!

Encuentra los enlaces rápidos a las páginas de recaudación de fondos para los seis grupos en: jhimmigrantsolidarity.org/emergency

Haz click en el nombre del grupo para conectarse directamente a su pagina web de recaudación de fondos y por favor done lo que pueda.

Adhikaar

Adhikaar es un grupo de justicia de inmigrantes con sede en Jackson Heights que sirve a la comunidad de habla Nepalí desde 2005. Centrado en los derechos de inmigración y los problemas legales; asi como las luchas laborales (incluida la de las trabajadoras domésticas), los problemas de salud y justicia social. Adhikaar ha desempeñado un papel clave en la innovadora Carta de “Derechos de las Trabajadoras Domésticas” del Estado de Nueva York.

Su donación apoyará los esfuerzos de ayuda mutua de Adhikaar durante la crisis, incluyendo el suministro de ayuda directa, educación comunitaria y la lucha continua por el cambio sistémico y empoderamiento de la comunidad

Damayan

Asociacion de Trabajadores Migrantes DAMAYAN, organiza trabajadores Filipinos con bajos salarios, incluidos trabajadores indocumentados, para luchar por sus derechos de género, trabajo, salud y de inmigracion. Establecida en 2002, la organización liderada por inmigrantes de Damayan construye el liderazgo a nivel de base para eliminar el tráfico laboral, lucha contra el fraude laboral y el robo de salarios; y exige estándares laborales justos para lograr justicia económica y social.

El Fondo de Emergencia de Damayan proporciona apoyo material directo durante la pandemia a los miembros de la comunidad, priorizando a las personas que están desempleadas, enfermas, ancianas o familias con niños pequeños.

Desis Rising Up and Moving (DRUM)

DRUM es una organización multigeneracional, dirigida por miembros de inmigrantes de la clase trabajadora del sur de Asia e Indo-Caribe, mujeres, jóvenes y familias indocumentadas. Desde que se fundo en el 2000, DRUM ha construido un modelo único de organización basado en la comunidad donde los miembros lideran cambios político-sociales que influyen en sus propias vidas, como obtener derechos para los inmigrantes hasta una reforma educativa, asi como en sus derechos civiles y justicia para los trabajadores. 

El fondo de emergencia de DRUM, “Construyendo poder y seguridad a través de la solidaridad”, proporciona ayuda directa a los miembros de la comunidad a través de alimentos, atención médica, vivienda y programas participativos para fortalecer el poder comunitario durante la crisis de Covid-19.

Make the Road New York

Make the Road lleva a cabo una amplia organización para empoderar a las comunidades latinas inmigrantes. Como organización local y estatal, Make the Road New York, construye el poder de las comunidades inmigrantes y de la clase trabajadora para lograr dignidad y justicia a través de la organización comunitaria, la educación transformadora, políticas innovadoras y servicios de supervivencia.

Done al Fondo de Respuesta a Emergencias Covid-19 (MTRNY) para apoyar a los trabajadores vulnerables, a los jefes de familia indocumentados y a las familias de bajos ingresos.

New Immigrant Community Empowerment (NICE)

NICE es una organización sin fines de lucro dedicada a mejorar las vidas de los trabajadores inmigrantes vulnerables y precarios, asi como de sus familias en Nueva York, tiene un enfoque en los jornaleros, las trabajadoras domésticas y los inmigrantes recién llegados. Durante más de 20 años, NICE ha ofrecido un amplio conjunto de servicios, organización comunitaria y programas de desarrollo de liderazgo.

Su donación apoyará a los directamente afectados por Covid de nuestra comunidad en NICE. NICE ha puesto en marcha y ha continuado con el acceso vital a los alimentos, la asistencia en dinero en efectivo y los programas generales de gestión de casos durante la pandemia.

Queens Neighborhoods United (QNU)

QNU es una organización comunitaria compuesta por miembros de Jackson Heights, Corona y Elmhurst. QNU cree en el establecimiento de un control democrático sobre el uso de la tierra, la fuerza policial, y las políticas de inmigración que afectan directamente a nuestras familias, hogares, negocios, lugares de trabajo y vecindarios. A través de la organización de base, el desarrollo de liderazgo, la promoción y la educación comunitaria, QNU construye el poder para combatir la criminalización y el desplazamiento en nuestras comunidades.

Su donación a QNU proporcionará ayuda mutua a los vecinos necesitados durante la pandemia.

Petición para Ferdoushi Sharif

Ferdoushi Sharif es una residente de Jackson Heights y madre de dos niñas, ambas ciudadanas Americanas. En 2017, el esposo de Ferdoushi, Bablu Sharif fue a su reporte de rutina con ICE, pero fue detenido y deportado a Bangladesh. Hoy Ferdoushi tiene también amenaza de deportación.

Por favor firme, apoye y evite que nuestra vecina, Ferdoushi Sharif, sea deportada, obtenga la ciudadanía y continúe viviendo con su familia en Queens. Haga clic AQUI.

Descargue la hoja informativa AQUÍ.

 

 

Carta Abierta a los Demócratas

En los últimos días, hemos escuchado a demócratas prominentes hablar de la necesidad de que el Partido, demuestre que es “fuerte respecto a la seguridad en la frontera”. En realidad, algunos políticos demócratas han abogado por ello, al permitir que Donald Trump construyera su muro obsceno, como parte de un acuerdo del presupuesto general de la seguridad fronteriza. Otros quieren gastar miles de millones de dólares en aviones no tripulados (referidos como drones en inglés), o en aumentar el tamaño de la Patrulla Fronteriza, y además gastar más dinero en escáneres, y otros componentes de alta tecnología para crear un “muro virtual”. Apoyar esas medidas sería un camino desastroso, uno que responde al racismo anti-inmigrante de Trump, al mismo tiempo que desalienta la base más progresista del Partido.

Si ésto sucede, sería un eco de la vergonzosa complicidad del Partido Demócrata en el encarcelamiento en masa. Esa política racista se promovió anteriormente con una retórica similar, “mano dura contra la delincuencia,” mientras se encerraba a millones de personas de color. Ahora, una vez más, los demócratas parecen estar considerando atacar a las personas pobres y de color, para aplacar a los votantes reaccionarios y financiadores. Una vez más, las consecuencias serían violaciones flagrantes de los derechos humanos. Nuevamente, los demócratas perderían toda credibilidad con aquéllos que creen en la justicia para todos. Y si se vá en esa dirección, una vez más el Partido lamentará los horrores que podría desatar.

Los inmigrantes y los refugiados no son el enemigo de este país, son su columna vertebral. Apoyan nuestra economía, aumentando su salud y dinamismo. Enriquecen la cultura. Deberíamos darles la bienvenida, y no tratarlos como un ejército invasor.

No necesitamos una “seguridad fronteriza más fuerte”. En cambio, debemos frenar la brutalidad cruel que nuestro gobierno está infligiendo a los refugiados e inmigrantes. Necesitamos detener las violaciones del derecho internacional, y debemos dejar de militarizar la frontera. Necesitamos extender la ciudadanía a los Soñadores. Aún más, tenemos que poner fin a las traumáticas políticas racistas, que han destrozado a miles de familias; poner un alto a los campos de concentración en el desierto; detener los horrores de niños refugiados que mueren de enfermedades curables y deshidratación; y debemos hacer que cese el negocio de las cárceles privadas, donde los inmigrantes terminan viviendo allí por años.

No necesitamos drones y escáneres de lujo. En cambio, necesitamos ayudar a recuperarse a los países latinoamericanos, devastados por las políticas malintencionadas de los Estados Unidos. Tenemos que dejar de apoyar a los dictadores y a los escuadrones de la muerte. Tenemos que poner fin a la desastrosa “guerra contra las drogas”, que ha extendido la muerte y la destrucción en todo el hemisferio. Necesitamos detener la dominación económica de América Latina, que a través de tratados de comercio neoliberal, la ha llevado a una pobreza generalizada y ha creado millones de refugiados.

No necesitamos más agentes de inmigración. En su lugar, debemos hacer que las agencias de inmigración de los Estados Unidos, retomen los estándares de funcionamiento anterior, para detener el reinado de terror que han sembrado. Tenemos que evitar que la Patrulla Fronteriza se suba a los autobuses de Greyhound, exija papeles y arreste a la gente porque parecen latinos o árabes. Tenemos que impedir que ICE embosque a las personas en los juzgados, y asalte lugares de trabajo. Tenemos que parar la deportación, de nuestros antiguos vecinos inmigrantes, respetuosos de la ley. Debemos impedir que el TSA nos toque a tientas, y registre nuestras computadoras portátiles y teléfonos; tenemos que evitar que seleccione a los musulmanes para realizar sus búsquedas. Por último, debemos impedir que nos acose a todos, como si fuera una mafia financiada por el gobierno.

El debate actual sobre la “seguridad fronteriza”, es un momento crucial para los demócratas. Sus decisiones ahora, determinarán su relación con el electorado en los próximos años, y su lugar en la historia. Nancy Pelosi dijo que el muro propuesto por Trump es “inmoral” y tiene toda la razón. ¿Cómo puede ser que la barrera “inteligente”, que algunos demócratas desean construir, sea menos inmoral?

Los estamos observando: decenas de millones de inmigrantes, las familias de inmigrantes, los partidarios de inmigrantes y todos los que se preocupan por la justicia. No esperen que votemos por Demócratas, que apoyan una versión “más amable y gentil” de las políticas de Trump en la frontera. Ni esperen que apoyemos a los políticos que adoptan políticas racistas antiinmigrantes, no importa de que tan “alta tecnología” estén hechas sus muros.

Los demócratas deben tomar una posición de solidaridad con nuestras hermanas, y hermanos inmigrantes y refugiados. De una u otra forma, los inmigrantes, los refugiados, los asilados y sus partidarios estamos decididos a derrotar el racismo y la xenofobia. ¿Están en contra o a favor nuestro?

La Red de Solidaridad con los inmigrantes de Jackson Heights

 


These Groups Have Agreed to Publicly Support Our Open Letter

 

Carta Abierta a los Demócratas

En los últimos días, hemos escuchado a demócratas prominentes hablar de la necesidad de que el Partido, demuestre que es “fuerte respecto a la seguridad en la frontera”. En realidad, algunos políticos demócratas han abogado por ello, al permitir que Donald Trump construyera su muro obsceno, como parte de un acuerdo del presupuesto general de la seguridad fronteriza. Otros quieren gastar miles de millones de dólares en aviones no tripulados (referidos como drones en inglés), o en aumentar el tamaño de la Patrulla Fronteriza, y además gastar más dinero en escáneres, y otros componentes de alta tecnología para crear un “muro virtual”. Apoyar esas medidas sería un camino desastroso, uno que responde al racismo anti-inmigrante de Trump, al mismo tiempo que desalienta la base más progresista del Partido.

Si ésto sucede, sería un eco de la vergonzosa complicidad del Partido Demócrata en el encarcelamiento en masa. Esa política racista se promovió anteriormente con una retórica similar, “mano dura contra la delincuencia,” mientras se encerraba a millones de personas de color. Ahora, una vez más, los demócratas parecen estar considerando atacar a las personas pobres y de color, para aplacar a los votantes reaccionarios y financiadores. Una vez más, las consecuencias serían violaciones flagrantes de los derechos humanos. Nuevamente, los demócratas perderían toda credibilidad con aquéllos que creen en la justicia para todos. Y si se vá en esa dirección, una vez más el Partido lamentará los horrores que podría desatar.

Los inmigrantes y los refugiados no son el enemigo de este país, son su columna vertebral. Apoyan nuestra economía, aumentando su salud y dinamismo. Enriquecen la cultura. Deberíamos darles la bienvenida, y no tratarlos como un ejército invasor.

No necesitamos una “seguridad fronteriza más fuerte”. En cambio, debemos frenar la brutalidad cruel que nuestro gobierno está infligiendo a los refugiados e inmigrantes. Necesitamos detener las violaciones del derecho internacional, y debemos dejar de militarizar la frontera. Necesitamos extender la ciudadanía a los Soñadores. Aún más, tenemos que poner fin a las traumáticas políticas racistas, que han destrozado a miles de familias; poner un alto a los campos de concentración en el desierto; detener los horrores de niños refugiados que mueren de enfermedades curables y deshidratación; y debemos hacer que cese el negocio de las cárceles privadas, donde los inmigrantes terminan viviendo allí por años.

No necesitamos drones y escáneres de lujo. En cambio, necesitamos ayudar a recuperarse a los países latinoamericanos, devastados por las políticas malintencionadas de los Estados Unidos. Tenemos que dejar de apoyar a los dictadores y a los escuadrones de la muerte. Tenemos que poner fin a la desastrosa “guerra contra las drogas”, que ha extendido la muerte y la destrucción en todo el hemisferio. Necesitamos detener la dominación económica de América Latina, que a través de tratados de comercio neoliberal, la ha llevado a una pobreza generalizada y ha creado millones de refugiados.

No necesitamos más agentes de inmigración. En su lugar, debemos hacer que las agencias de inmigración de los Estados Unidos, retomen los estándares de funcionamiento anterior, para detener el reinado de terror que han sembrado. Tenemos que evitar que la Patrulla Fronteriza se suba a los autobuses de Greyhound, exija papeles y arreste a la gente porque parecen latinos o árabes. Tenemos que impedir que ICE embosque a las personas en los juzgados, y asalte lugares de trabajo. Tenemos que parar la deportación, de nuestros antiguos vecinos inmigrantes, respetuosos de la ley. Debemos impedir que el TSA nos toque a tientas, y registre nuestras computadoras portátiles y teléfonos; tenemos que evitar que seleccione a los musulmanes para realizar sus búsquedas. Por último, debemos impedir que nos acose a todos, como si fuera una mafia financiada por el gobierno.

El debate actual sobre la “seguridad fronteriza”, es un momento crucial para los demócratas. Sus decisiones ahora, determinarán su relación con el electorado en los próximos años, y su lugar en la historia. Nancy Pelosi dijo que el muro propuesto por Trump es “inmoral” y tiene toda la razón. ¿Cómo puede ser que la barrera “inteligente”, que algunos demócratas desean construir, sea menos inmoral?

Los estamos observando: decenas de millones de inmigrantes, las familias de inmigrantes, los partidarios de inmigrantes y todos los que se preocupan por la justicia. No esperen que votemos por Demócratas, que apoyan una versión “más amable y gentil” de las políticas de Trump en la frontera. Ni esperen que apoyemos a los políticos que adoptan políticas racistas antiinmigrantes, no importa de que tan “alta tecnología” estén hechas sus muros.

Los demócratas deben tomar una posición de solidaridad con nuestras hermanas, y hermanos inmigrantes y refugiados. De una u otra forma, los inmigrantes, los refugiados, los asilados y sus partidarios estamos decididos a derrotar el racismo y la xenofobia. ¿Están en contra o a favor nuestro?

La Red de Solidaridad con los inmigrantes de Jackson Heights

 


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